martes, 10 de marzo de 2020

La voz profética de Greta



                          


Ustedes se han robado mis sueños y mi niñez con sus palabras vacías. Y, sin embargo, yo soy una de las afortunadas. La gente está sufriendo, la gente está muriendo. Ecosistemas enteros están colapsando. Estamos en el inicio de una extinción masiva y lo único de lo que ustedes pueden hablar es de dinero y de cuentos de hadas sobre crecimiento económico eterno. ¡Cómo se atreven!” 
 Con estas palabras en un discurso estremecedor, Greta Thunberg, una adolescente sueca de 16 años, sacando el ardor de su interior que no le permite más callar, hizo temblar al auditorio en la apertura de la Cumbre de la ONU, el 26 de setiembre de 2019. Se dirigió a los líderes mundiales de 60 países y con un valor asombroso, los acusó de omisión y traición frente al cambio climático. 

         La voz de esta joven es el resultado de un clamor mundial que en especial están levantando las nuevas generaciones, porque pareciera que nosotras, las personas más adultas, vemos con indiferencia la extinción de especies, el deshielo de los glaciares, el plástico en los océanos, la emisión de gases efecto invernadero, la devastación de los bosques; que como verdaderas catástrofes, mantienen nuestra casa común al borde de un colapso.

   El cambio climático no es una idea o una posibilidad a largo plazo, es ya una alarmante realidad, causada por el abuso que la humanidad hemos tenido con la creación. Estamos en un momento urgente, de decisiones inmediatas. De ahí la vehemencia de las palabras de Greta, que en nombre de la juventud, y de las mujeres jóvenes, hace un desesperado llamado a las naciones del mundo.

   Como un dato curioso, aunque no extraño, la presidencia de las Naciones Unidas desde sus inicios en el año 1946, al 2019, ha estado ocupada de forma desbordada por hombres. En más de siete décadas solamente cuatro mujeres han ocupado el cargo de presidentas de la ONU. Esto me hace pensar que la dirección del clamor de esta joven mujer, se dirigió a un público mayoritariamente masculino. Lo que hace aun más valioso su discurso.

    "Nos están fallando. Pero los jóvenes están empezando a entender su traición", advirtió Greta con enojo y emoción. Nos habló a usted y a mí, generación adulta que hemos sido inconscientes en el uso de los recursos naturales. Organizaciones como la Unesco han advertido que de no tomar las medidas para la eliminación de los microplásticos y si los países no regulan el uso de este material, en 2050 en los océanos habrá más plásticos que peces, porque en la actualidad, cada año llegan al mar 8 millones de toneladas de plástico.

     Es por ello que Greta nos representa a todos y todas, pero en especial a las mujeres. Porque es conocida nuestra inclinación a la defensa de la vida en todas sus formas, y en este caso, en particular, no es casualidad que sea una mujer la que levante la voz. Y no es cualquier voz, es el grito profético que alerta sobre el necesario cambio de mentalidad, de costumbres, de políticas para seguir disfrutando de la casa común; caso contrario, estamos a las puertas de la autodestrucción. 

Nosotras las mujeres, que por siglos hemos sido silenciadas, avasalladas en nuestras ideas y pensamientos; castradas en nuestros impulsos por defendernos a nosotras mismas y a nuestras familias frente a la cultura de muerte, estamos siendo dignamente representadas por una joven mujer, que expresa su convicción de que no nos pueden engañar más. ¿Quién ha fallado? El sistema, las estructuras, los esquemas dominadores que se arrodillan frente al poder. Y allí en ese sistema, hombres y mujeres nos hemos quedado atrapadas, reproduciendo estímulos que perpetúan el concepto de dominadores y dominados. 

     El cambio climático nos ahoga. Ya no hay región que se libre de incendios forestales que matan especies a granel, de altas temperaturas y sequías, de inundaciones que avasallan todo lo que encuentren a su paso, de contaminación de todo tipo. El cambio debe empezar por cada uno y cada una, pero es urgente el cambio desde las políticas gubernamentales del mundo entero. El clamor de Greta es nuestro también; no nos engañemos más, no evadamos la realidad de un planeta que gime desde sus entrañas, porque está herido, apuñalado, golpeado y ultrajado. De alguna manera hace analogía con tantos cuerpos de mujeres que en igual condición han sucumbido históricamente y lo siguen haciendo a manos de criminales masculinos perversos. 


Tengo la firme convicción de decir junto a Greta: “El mundo está despertando y el cambio está en camino, les guste o no”. 

Nieves Lucía Rodríguez Quesada
Costa Rica


jueves, 5 de marzo de 2020

TENTACIONES Y REALIDADES


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Comenzamos otra cuaresma y debemos pensar cuál será nuestra penitencia o ayuno este año: ¿Nos restringiremos algún alimento, o fumar, o el café, o las salidas con amigos/as? ¿Visitaremos enfermos, ancianos, huérfanos? ¿Apoyaremos alguna institución benéfica con dinero o con nuestro tiempo?

En esta época no puedo dejar de pensar en las personas guatemaltecas que viven en perenne penitencia y ayuno. Según el Índice de Pobreza Multidimensional de Guatemala, publicado en diciembre de 2018[1], el 60% de guatemaltecos viven en pobreza multidimensional, o sea que viven con privaciones en el 30% o más de los indicadores utilizados en el estudio. Es decir, que 6 de cada 10 guatemaltecos apenas cubren sus necesidades de alimentación o ni siquiera eso. Y no olvidemos los factores que agudizan la pobreza: ser mujer, ser indígena, ser persona con discapacidad, vivir en un área rural lejana o vivir en un área urbana roja, etc.

En el primer domingo de cuaresma, la liturgia de la Palabra trata el tema de las tentaciones de Jesús antes de iniciar su vida pública. Yo diría que, aquí en Guatemala, las tentaciones más frecuentes a nivel social son la avaricia, la indiferencia y la falta de solidaridad. Por eso quienes tienen poder político o económico caen tan fácilmente en las redes de la corrupción. No hay otra explicación para que este país tenga en el abandono a más de la mitad de su población.

El miedo es generador de grandes tentaciones. Nuestros miedos nos marcan, nos dominan, nos tornan agresivas/os. No es el odio el antónimo del amor; es el miedo. Es por miedo que quienes ostentan el poder recelan y agreden, por miedo a los poderes de los y las otras.  Es su inseguridad la que los hace lastimar, humillar, rebajar. Y mientras más capaz, más segura y más madura la otra persona, más amenazados se sienten y más necesidad tienen de acabar con la amenaza.

Tristemente, a nivel social y político esto ha causado que en Guatemala los gobiernos no inviertan como se debe en educación, no sea que la población aprenda a ser crítica y a tomar buenas decisiones. ¡Grave peligro para la corrupción y la impunidad! Ya vemos cómo el nuevo gobierno está demostrando que tiene miedo a las ongs, porque están formando a la población, ayudando a generar consciencia, autodeterminación y ciudadanía. Sobre todo porque el mayor trabajo se ha venido realizando entre la población más vulnerable, discriminando positivamente a sectores de población indígena y mujeres. Este trabajo de hormiga podría llegar a transformar la sociedad guatemalteca, ¡qué peligroso para quienes quieren seguir aprovechándose de una población ignorante y manipulable!

A otro nivel, también en las instituciones sucede que autoridades inseguras prefieren deshacerse del personal competente, no sea que les pongan en evidencia. Por supuesto, se sienten más cómodas rodeadas de soba-levas sigue-órdenes que de personal capaz y proactivo que aporte buenas ideas y rete su capacidad de reconocer y adaptarse a los signos de los tiempos. El miedo y la inseguridad de las personas corruptas e incapaces que llegan a posiciones de poder ¡causan tantos estragos!

Con demasiada frecuencia las mujeres recibimos ataques que son consecuencia del miedo a nuestras capacidades, a nuestras voces, a nuestros argumentos, a nuestra sensibilidad. En nuestras historias de vida fácilmente nos encontramos en situaciones así, porque en las sociedades patriarcales, a mayor superación de las mujeres, ya sea a nivel personal o profesional, en vez de recibir recompensas recibimos más palo, pues crece el recelo y el miedo en los hombres. Y entonces se despierta en nosotras también el miedo; y la tentación es a rendirnos, retroceder, caer de nuevo bajo la dominación, reprimirnos y auto-anularnos.

¡Pero no!  No debemos caer en esa tentación, ¡Dios no lo permita! La victoria de Jesús sobre las tentaciones en el desierto fue como su “rito de iniciación”, con el cual quedó acreditado para iniciar con fuerza su misión: su predicación y su testimonio sobre el Reino, fiel a la Voluntad Divina hasta la muerte en cruz. Cada victoria sobre nuestras tentaciones de indiferencia, insolidaridad o de rendirnos al miedo nos va preparando, como a Jesús, para trabajar con más fuerza y empeño en nuestra misión de construir Reino aquí y ahora, hasta las últimas consecuencias.

Al final de cuentas, la gran tentación es la de olvidarnos de la Shekinah, olvidarnos de que la Ruah no nos abandona cuando tenemos actitud de escuchar humildemente Su Voz[2] y actuar en consecuencia. Ruego que, en esta cuaresma 2020, nuestras penitencias y oraciones nos conduzcan a prestar más atención a esa Voz y a renovar nuestras fuerzas para vencer las tentaciones que se nos presenten, y así llevar a feliz término el trabajo que la Sabiduría nos tiene programado para este año.

Escrito por Regina Castañeda. Ingeniera Química Industrial y estudiante de Teología


[2] Uso “Su Voz” y no “Su Palabra” porque la Sabiduría Divina la encontramos tanto en las Sagradas Escrituras como en la realidad de la vida, cualquiera sea el contexto en el que nos encontremos, siempre que prestemos atención conscientemente, con corazón y mente bien dispuestos.


8 de marzo 2020


El lema del 
Día Internacional de la Mujer 2020, celebrado este 8 de marzo, es “Soy de la Generación Igualdad: Por los derechos de las mujeres”. Como parte de la conmemoración del Día de la Mujer, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) invita a participar en redes sociales con la hashtag #GeneraciónIgualdad.


Puedes visitar el enlace pinchando aquí:  https://www.unwomen.org/es/news/stories/2020/2/compilation-small-actions-big-impact-for-generation-equality