martes, 2 de agosto de 2022

El 9 de Agosto y las mujeres de los pueblos indígenas.

 

Invitación

La Asamblea General la Organización de las Naciones Unidas (ONU) decretó, en su resolución A/RES/49/214, declarar el día 9 de agosto para conmemorar el Día Internacional de los Pueblos Indígenas.

Para el año 2022 la temática versa sobre: El papel de las mujeres indígenas en la preservación y transmisión del conocimiento tradicional[1].

La población indígena se encuentra distribuida en más de 90 países y se calcula la existencia de aproximadamente 476 millones de indígenas en todo el mundo.

Respecto a la población mundial, ellos constituyen más del 6 % lo relevante es que representan alrededor del 15 % de las personas que viven en pobreza extrema.

Otro dato para subrayar es que estos pueblos indígenas poseen, ocupan o utilizan una cuarta parte de la superficie del mundo, protegen el 80 % de la biodiversidad que aún queda en el planeta.

Tienen conocimientos y experiencias ancestrales acerca de cómo adaptarse, mitigar y reducir los riesgos derivados del cambio climático y los desastres naturales.[2]

Colonización y Genocidio cultural

En Ottawa, Canadá, el nominado Informe de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación[3] publicado en 2015, evidencia una las páginas más oscuras del Canadá; La Ley Sobre Los Indios, emitida en 1876 colocaba a todos los niños indígenas bajo la tutela del Estado canadiense.

En el año 1883, John A. McDonald, primer ministro de Canadá afirmaba que “los niños indígenas deberían ser retirados lo máximo posible de la influencia de sus padres y la única forma de lograrlo era de enviarlos a escuelas industriales donde podrán adquirir las costumbres y prácticas de los blancos”.

Después de 6 años de investigación, el informe final, en sus miles de páginas, narra las atrocidades, abusos físicos, psicológicos, sexuales y el exterminio cultural al que fueron sometidos más de 150 mil niños de los pueblos indígenas. Ellos fueron arrancados de sus grupos familiares y étnicos y enviados a pensionados, en su gran mayoría dirigidos por comunidades religiosas. Principalmente se vieron involucrados la iglesia Católica, Anglicana

Unos 3.200 niños murieron, la gran mayoría antes de 1940, debido a todo tipo de enfermedades, entre ellas la tuberculosis. Las condiciones sanitarias eran tan malsanas que el índice de mortalidad en los pensionados era 5 veces más elevado que en el resto de la población. Estas escuelas de internados operaron por un siglo entero, entre 1870 y 1970.

El principal objetivo contemplaba, “matar al indígena en el niño”. Un proceso atroz de colonización y sometimiento, de despojo de su lengua, valores culturales, sabiduría ancestral y su cosmovisión. Todo esos con métodos de abuso sistemático hacia los niños indígenas.

En mayo de 2021, todas estas páginas oscuras emergen nuevamente colocando en un gran revuelo a la sociedad y el estado canadiense. Se trata de una fosa común con los restos de 215 niños que fue hallada en un internado creado para integrar a miembros de la comunidad indígena de Canadá. El caso de antiguos estudiantes de la Kamloops Indian Residential School en Columbia Británica, en el oeste de Canadá. Este centro inicialmente estuvo bajo la dirección de la iglesia católica, y luego pasó a la dirección del gobierno cerrando en 1978. El internado Kamloops era el más grande de todo este sistema, que se conoció con el nombre de Sistema Escolar de Residencias Indígenas.[4]

Las reacciones tanto hacia el informe del 2015 como los hallazgos de 2021, no se hicieron esperar. Para la población canadiense hay consternación y dolor. El mismo primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, lamentó el hallazgo en el antiguo internado. Y declaró que como católico, se sentía avergonzado de tales hechos esperando un pronunciamiento oficial del Vaticano.[5]

El pasado mes de Julio 2022, El Papa Francisco hizo su “peregrinación penitencial”, el principal objetivo ha sido pedir perdón por los abusos cometidos por religiosos católicos en los centros de internados para niños Indígenas de Canadá, perdón por el genocidio cultural y el sometimiento colonizador.

Ha sido loable el gesto del Papa Francisco. Varios lideres y lideresas de los pueblos indígenas de Canadá, han agradecido y apreciado esta visita y acto penitencial.  Aún existen otros sectores y grupos que consideran insuficiente estas acciones.

El genocidio de las mujeres indígenas en Canadá

  Los abusos y genocidio cultural perpetrado contra la población indígena del Canadá entre los siglos XIX y XX, conmocionan a la población y urgen a realizar acciones concretas de reparación y resarcimiento a las víctimas.

Pero, en pleno siglo XXI con menor distancia en el tiempo, se documentan las crecientes acciones contra mujeres y niñas. Nos referimos ahora al asesinato y desapariciones de mujeres y niñas indígenas en el Canadá.

Las primeras denuncias de secuestros y desapariciones de mujeres indígenas datan de 1980, a partir de estos hechos se creó la unidad de Investigación Nacional sobre las Mujeres y Niñas Indígenas Desaparecidas y Asesinadas (INMNIDA) (National Inquiry into Murdered and Missing Indigenous Women and Girls, MMIWG), que tras 33 meses concluyó que los casos constituyen un genocidio.[6]

 La población indígena solo representa un 4,9% de la población total de Canadá, los datos arrojan que entre 2001 y 2015 las mujeres de esta etnia asesinadas eran casi el 25% de todas las víctimas femeninas de homicidio en el país. El informe arriba citado, revela que la tasa de asesinatos y desapariciones de mujeres indígenas es 12 veces más alta que la de cualquier otro grupo demográfico del país. Estas cifras son alarmantes y dan mucho qué pensar.

Y nos preguntamos: ¿Por qué Canadá, es un etnocida o feminicida étnico? Es importante recordar que en la época de la conquista y la colonia, los invasores europeos blancos se consideraron ellos mismo como una raza superior frente a los pueblos originarios o aborígenes de Canadá. Los sistemas de seguridad ciudadana y los operadores de justicia consideran a las mujeres indígenas como alcohólicas, drogadictas que no merecen la atención del sistema de protección y seguridad ciudadana. El racismo, el colonialismo y el sexismo de larga data, junto con la indiferencia en la sociedad canadiense son entre otras las principales causas de este genocidio

Si en el siglo pasado el objetivo era “matar al indígena en el niño”, ¿Qué persigue la creciente ola de feminicidio indígena en Canadá?, acaso busca ¿Matar al vientre que hace nacer al indio? o ¿Matar la transmisión del conocimiento tradicional? A pesar de los informes y recomendaciones emitidas en los mismos, el sistema canadiense sigue fallando en el deber de dar protección a todos los ciudadanos y ciudadanas canadienses.

Detrás de todo esto subyace la arrogancia del colonialismo blanco occidental, la usurpación y ocupación de los territorios de estos primeros pueblos, los intereses económicos, la visión desarrollista occidental y el sistema patriarcal que invisibiliza el papel protagónico de las mujeres en sus comunidades.

Mujeres indígenas en la preservación y transmisión del conocimiento tradicional

En contraste con esos Genocidios Culturales, Genocidios étnicos, y desde un largo recorrido, podemos afirmar la convicción, cada vez más creciente y manifiesta, de los pueblos originarios acerca de sus derechos sociales, culturales, económicos y la conservación de sus tradiciones y sabidurías.

El papel de la mujer indígena en la preservación de las tradiciones es muy relevante y necesario. Ella es la transmisora de la lengua y valores de convivencia comunitaria. Como mujeres, su mirada holística le permite observar los ciclos naturales de la vida, extraen y transmiten saberes ancestrales. Son el sostén familiar, cuidadoras, guardianas del conocimiento,

Transmite valores de armonía, en la relación con la madre tierra y todos los vivientes con quienes comparte su espacio y tiempo. Son artesanas no solo de tejidos para la vestimenta, sino también de las relaciones intergeneracionales. Son líderes y defensoras de los derechos humanos.

Con demasiada frecuencia aún sufren niveles interseccionales[7] de discriminación por motivos de género, etnia y estatus socioeconómico. Su derecho a la libre determinación, el autogobierno y el control de los recursos y tierras ancestrales ha sido violado durante siglos. Queda mucho por hacer para lograr más espacio en los puestos de toma de decisiones y operación de la justicia.

Este 9 de Agosto 2022, debe marcar un momento importante para reforzar lo ya iniciado y caminar hacia la conquista de esos espacios de participación, que hagan de las mujeres indígenas verdaderas actoras en la preservación y transmisión del conocimiento tradicional y la configuración de sus pueblos como espacios humanizadores y armónicos para todas las sociedades.

La sensibilización, información sobre estas problemáticas nos toca en primera persona, la consigna que repetimos “Lo que le sucede a una, les sucede a todas” debe pasar a expresiones concretas, hasta que todo sea como lo soñamos.

María Concepción Vallecillo

Integrante activa de Núcleo Mujeres y Teología


[7] La interseccionalidad es una herramienta para el análisis, el trabajo de abogacía y la elaboración de políticas, que aborda múltiples discriminaciones y nos ayuda a entender la manera en que conjuntos

diferentes de identidades influyen sobre el acceso que se pueda tener a derechos y oportunidades