En estos momentos, hay una realidad convulsa en
muchas partes del mundo, hay muchos movimientos de mujeres en lucha por ser
ellas las que tomen las decisiones en sus vidas y por escapar, de alguna
manera, al pensamiento hegemónico patriarcal. Puede parecer ilusorio pero me ha
hecho pensar en el texto bíblico de Daniel 2, 31 en el que se relata el sueño
de Nabucodonosor con una visión: “una estatua majestuosa, una
estatua gigantesca y de un brillo extraordinario; su aspecto era impresionante.
Tenía la cabeza de oro fino, el pecho y los brazos de plata,
el vientre y los
muslos de bronce, las piernas de hierro y los pies de hierro mezclado con
barro”.
En esta
visión una piedra se desprendió sin intervención humana, chocó con los pies de
hierro y barro de la estatua y la hizo pedazos. Esto me ha hecho pensar en que
el patriarcado, a pesar de los casi cuatro mil años de existencia, tal vez sea
ese ídolo con pies de barro, que tarde o temprano caerá hecho pedazos.
Son
muchos los años de dominación y subordinación, pero creo que se están empezando
a abrir algunas grietas en este patriarcado que hará que algún día, se caiga a
trozos, tal vez no lo veremos ni tú ni yo, pero tengo la esperanza que serán otras
mujeres y otros grupos, oprimidos hoy,
los que lo verán. A los largo del ancho mundo, son muchas las mujeres que están
tomando conciencia de que ellas tienen la misma dignidad y los mismos derechos
que los hombres, ya se han cansado de la subordinación y de que les digan lo
que tienen que hacer, cómo tienen que vivir, qué reglas éticas o morales tienen
que seguir, etc., YA NO MÁS, BASTA YA.
Han proliferado, en los últimos
años, una serie de
movimientos en contra de la violencia contra el cuerpo de
las mujeres: “#Ni una menos”
Argentina, “#Metoo” en Estados Unidos,
“#BalanceTonPorc” en Francia, “#YoReconozco” en
México, en España el caso de la “Manada” ha generado más conciencia del
problema y se llenaron las calles. Son movimientos de resistencia colectiva que
buscan la igualdad entre hombres y mujeres, se han desarrollado
alrededor del
mundo ya que el problema de acoso, desigualdad, violencia, misoginia, etc.,
está presente en todo el planeta. Hasta famosas estrellas de cine han empezado
a denunciar el acoso sexual y los abusos sufridos y han creado un movimiento
contra el abuso sexual
"Time's Up".
Toda
esta realidad es fruto del patriarcado que durante estos cuatro mil años[1],
ha ejercido la mitad de la humanidad, los hombres, sobre la otra mitad, que son
las mujeres. Durante todo este tiempo se han creído superiores y con todos los
derechos sobre las mujeres, sus cuerpos, sus mentes y sus vidas. Pero está
surgiendo otra conciencia en las mujeres que acabará con este patriarcado. Hay
que aprovechar este momento de la historia para realizar una revolución
cultural que transforme el patriarcado y se acabe por abolirlo.
Gerda Lerner, en el libro “La creación del patriarcado “dice:
“Hace tiempo que sabemos que la violación ha sido una forma de
aterrorizarnos y mantenernos sujetas. Ahora sabemos también que hemos
participado, aunque fuera inconscientemente, en la violación de nuestras mentes”. Estamos en un momento histórico para decir NO MÁS,
no más violaciones en nuestros cuerpos, no más violaciones en nuestras mentes.
Las mujeres hemos de trabajar y transformar el androcentrismo que tenemos
metido en la cabeza y poco a poco, liberarnos para poder llegar a ser nosotras
mismas. Somos muchas las que queremos hacer este cambio, apoyémonos y
trabajemos para lograr, aunque tú y yo, no lo veamos, la liberación de las
mujeres.
Maite Menor Esteve |